En esta nota veremos cuáles son las principales opciones de publicación tanto para escritores como para traductores y editores independientes en Colombia. Cada método tiene sus ventajas y sus desventajas, que trataremos de explicar.
El sueño de (casi) toda persona que escribe, traduce o edita por iniciativa propia un libro es verlo publicado y que no se quede archivado en un cajón o en una carpeta de la computadora. Sin embargo, no siempre sabemos qué opciones hay para que un libro salga a la luz o cuál de todas nos conviene. Si bien es cierto que la tecnología pone en nuestras manos cada vez más herramientas para comunicar nuestras ideas y dar a conocer nuestro trabajo, por la misma razón hay una sobrecarga de información en la que naufraga la mayoría de los libros que día a día se publican, por lo que, antes de elegir un método de publicación, es necesario sopesar sus ventajas y desventajas, sobre todo la proporción entre accesibilidad, costos y visibilidad del producto final en el mercado. Estas son las tres variables clave con que valoraremos cada uno de los métodos descritos a continuación.
Pero antes, para tener claridad sobre los conceptos, hablaremos un poco sobre la diferencia entre imprimir y publicar un libro:
Diferencias entre imprimir y publicar
Tanto los autores que deciden autopublicarse como los editores independientes y las pequeñas editoriales que apenas empiezan a surgir tienden a quedarse a medias en el proceso de publicación: editan las obras, las maquetan, las imprimen, pero no hacen la tarea de la distribución y la divulgación: ahí está la diferencia. Cuando un autor, por ejemplo, imprime algunas decenas o algunos cientos de ejemplares de su obra para comercializarlos en su entorno más íntimo (familia, amigos, barrio, ciudad), hablamos de impresión a secas. Para que la reproducción y explotación comercial de una obra pueda llamarse propiamente publicación, esta debe, sobre todo, llevarse a cabo por canales especializados (librerías, tiendas virtuales, etc.) y con una difusión más o menos extensa (nacional o internacional). Hasta hace poco el tiraje (cantidad de ejemplares impresos) era otro criterio decisivo para distinguir entre publicación e impresión, pero este criterio ha pasado a segundo plano gracias al auge de los libros electrónicos y de la impresión bajo demanda.
Ahora sí, vamos a lo nuestro.
Publicación tradicional
Este ha sido el método de publicación más utilizado desde el invento de la imprenta, y la razón es simple: muy pocas personas tenían acceso a la tecnología y a los insumos necesarios para imprimir un libro. Quienes podían y decidían hacerse con estos recursos se convertían en los profesionales del libro: los editores, quienes además debían conocer bien la literatura que se escribía en su entorno, lo que los lectores preferían leer y, en fin, todo lo relacionado con el mercado del libro, y además, por supuesto, tener las habilidades y el bagaje necesarios para desempeñar bien su trabajo, los cuales iban perfeccionando e innovando con la experiencia. Hoy en día muchas personas tienen acceso a una tecnología que les permite imprimir sus libros: desde procesadores de texto, como Microsoft Word, hasta las impresoras de escritorio, cada vez más cómodas y económicas. Pero, como vimos antes, hay una gran diferencia entre impresión y publicación, y aquí es donde sigue teniendo gran relevancia la figura del editor como profesional del libro.
La publicación tradicional consiste en enviar el manuscrito (hoy por hoy, un archivo de texto, al que sigue llamándosele "manuscrito" por costumbre o nostalgia) a un editor o a una editorial con el fin de que lo revise y decida si quiere publicarlo. De esta forma el editor o la editorial corre con los gastos de edición, maquetación, impresión y distribución del libro que decida publicar y paga al autor las regalías de las ventas por los derechos de reproducción (aquí es importante anotar que en ninguno de estos casos el autor debe ceder los derechos de autor de su obra, sino solo los de reproducción y explotación comercial). Últimamente, sin embargo, ha entrado en boga el método de coedición, en el que el autor corre con una parte de los gastos. Este método lo analizaremos más adelante.
Ventajas de la publicación tradicional:
El autor no tiene que correr con los gastos de edición y distribución de su libro, que suelen ser elevados.
Tampoco tiene que contactar con las librerías para que vendan su libro, un proceso que suele ser engorroso y en algunos casos imposible, pues existen librerías que no aceptan a autores independientes como proveedores.
Los libros tienen un mayor alcance y más probabilidades de venta: si bien hay libros, incluso los publicados por las grandes editoriales, que terminan condenados al infierno de las bodegas, al tener una mayor difusión, eventos de lanzamiento y presentación y estar disponibles en librerías, es más probable que se vendan. En este punto es importante recalcar que el autor tiene también parte en la responsabilidad de dar a conocer su obra.
Desventajas de la publicación tradicional:
Para que una editorial decida publicar un libro, este debe pasar por un filtro editorial más o menos estricto según el prestigio y el juicio crítico de aquella.
Cada vez son más, sin embargo, las editoriales que no se guían por un juicio crítico sino por la popularidad que tenga el autor, sobre todo en las redes sociales, lo que representa tanto una desventaja para los autores desconocidos como un perjuicio para los lectores.
Las editoriales suelen tener un tope de publicaciones, por lo que es posible que un libro no sea publicado aun cuando pase el filtro editorial.
No todas las editoriales tienen convocatorias de publicación. Algunas son menos abiertas que otras a la hora de recibir manuscritos y sus canales de recepción no son tan públicos como podríamos esperar.
Autopublicación
Llamaremos autopublicación a secas al proceso en que un autor edita él mismo su obra, hace imprimir los ejemplares y se encarga de promocionarlos y distribuirlos. También es posible en esta modalidad contratar los servicios de un profesional para las tareas iniciales e intermedias, como la corrección del manuscrito, la edición en general o la maquetación y el diseño de cubierta. Si bien es la opción más directa y, por tanto, la más efectiva en apariencia, tiene grandes desventajas, como veremos a continuación.
Ventajas de la autopublicación:
No requiere intermediarios, por lo que es una buena opción si se cuenta con los medios y los conocimientos suficientes sobre edición, diseño, marketing, ventas, etc.
Desventajas de la autopublicación:
Hacer un libro, con todos los pasos, la logística y las exigencias que esto conlleva, no es para aficionados, así que si no se cuenta con las herramientas y los conocimientos suficientes, es altamente probable que el producto no sea satisfactorio para el autor y, sobre todo, para los posibles lectores.
Al no contar con el respaldo de un sello editorial, ocurre con frecuencia que los libros autopublicados no despierten la credibilidad o el interés del lector.
En cuanto a la distribución, una de las herramientas a que hicimos referencia en el primer punto es el contacto con las librerías, un proceso que, como dijimos antes, es complicado y a menudo inviable.
Autopublicación por medio de una editorial
Por lo general, las editoriales tradicionales no solo se sostienen de la venta de sus libros sino que prestan servicios editoriales a particulares, desde la corrección de textos hasta la publicación y distribución de sus obras. Esta es la mejor opción para un autor que decida autopublicarse, pues no requiere pasar por un filtro editorial y tiene a su disposición a un grupo de profesionales trabajando en la edición, la maquetación, el diseño de cubierta, la impresión, la distribución y la promoción de su libro.
Ventajas de la autopublicación por medio de una editorial:
El autor no tiene que echarse a la espalda las exigentes tareas que implican la edición y la publicación de su libro, por lo que puede dedicar más tiempo a escribir y a pulir su obra.
Como ya dijimos, no es necesario que un libro pase por un filtro editorial para contratar un paquete de servicios editoriales.
El resultado será profesional y contará, según el caso, con el respaldo de un sello editorial.
Desventajas de la autopublicación por medio de una editorial:
Según la editorial y el plan contratado, los costos pueden ser elevados.
También según el plan contratado, los libros podrían no ser distribuidos y promocionados con mucha eficiencia. Hay planes que no incluyen el servicio de promoción (mercadeo, presentaciones, etc.) para no elevar demasiado los costos. También es natural que las editoriales den prioridad a sus propios libros en la promoción editorial.
Coedición
La coedición es un método intermedio entre la publicación tradicional y la autopublicación por medio de una editorial, así que comparte características de ambas y, por tanto, algunas de sus ventajas y desventajas. Como ya mencionamos, la coedición consiste en que una editorial acepta un manuscrito para publicarlo a condición de que el autor corra con una parte de los costos. Esto puede darse por varias razones, entre ellas que la editorial no cuente con los recursos suficientes para aceptar un manuscrito más (recordemos que suelen tener un tope de publicación) o que no esté muy segura de que el libro vaya a venderse bien y entonces decide asegurar una parte de la inversión por medio de un cobro parcial al autor.
Ventajas de la coedición:
El autor solo debe cubrir una parte de los costos, así que el gasto no es tan elevado como en la autopublicación por medio de una editorial.
El autor no tiene que ocuparse de la distribución y promoción de su obra (contacto con librerías y mercadeo), pues de la venta del libro depende también que la editorial salve su inversión. Recalcamos, sin embargo, la responsabilidad que tiene siempre un autor de dar a conocer su obra.
Los libros tienen un mayor alcance y más probabilidades de venta.
Desventajas de la coedición:
El autor, al presentarse a una convocatoria de publicación, espera que su obra sea elegida para publicación por parte de la editorial, por lo que una propuesta de coedición no es siempre bien recibida.
Al igual que en la modalidad de publicación tradicional, la obra debe pasar por un filtro editorial (que, recordemos, no se guía siempre por la calidad literaria) y también encontramos editoriales no muy abiertas a recibir manuscritos.
Amazon
Sin duda, Amazon KDP es una de las más grandes plataformas de publicación y comercio de libros a nivel mundial. Además, gracias a su tecnología, facilita enormemente el proceso de autopublicación. Sin embargo, recomendamos usarla como complemento y no como la primera y única opción a la que acuda un autor. A continuación exponemos las razones.
Ventajas de la autopublicación por medio de Amazon KDP:
Es accesible para la práctica totalidad de autores y de obras, de forma gratuita.
Facilita el proceso de diseño y maquetación para los autores y editores independientes que no manejan herramientas profesionales de diseño.
Permite publicar tanto en formato físico (rústico y tapa dura) como en formato electrónico.
Permite comercializar el libro a nivel internacional.
Ofrece porcentajes de regalías razonables.
Desventajas de la autopublicación por medio de Amazon KDP:
Puede resultar difícil crear una cuenta y comprender a cabalidad los términos del contrato.
Para evitar sobrecostos, irregularidades y retrasos en los pagos de las regalías, el autor debe poseer una cuenta bancaria en los Estados Unidos, misma con la que normalmente no cuenta un autor en Colombia.
Si bien, una vez creada la cuenta, es fácil que los libros sean aceptados, por la misma razón existe una sobreabundancia de títulos en la plataforma, de todo tipo de autores, por lo que cualquier obra publicada allí simplemente se pierde entre las demás si no se hace un buen trabajo de promoción de la misma.
Por la misma accesibilidad y falta de criterios de selección, no cuenta con una buena reputación entre los lectores más exigentes, para muchos de los cuales no es siquiera una opción de búsqueda.
En cuanto a la edición, la plataforma solo cuenta con un verificador de errores ortográficos, insuficiente para asegurar la buena calidad de la redacción.
No ofrece muchas opciones de impresión: solo dos tipos de papel y no admite solapas para el formato rústico.
Como vemos, todos estos métodos oscilan entre la publicación tradicional y la autopublicación, variando en los tres conceptos clave mencionados al principio de la nota: accesibilidad, costos y visibilidad. Así que, antes de decidirte por uno de ellos, debes preguntarte: ¿Qué tan accesible es cada método para mi obra en particular? ¿Cuáles son los recursos con los que cuento? Y ¿qué tan lejos quiero que llegue mi obra?
Espero que esta nota te haya servido o te sirva en el futuro para tomar una decisión. Y, por último, buena suerte en el arduo camino de la literatura.
Hola,
Buena nota. me gustaría saber, Cuáles son los criterios de publicación de ediciones letra dorada?